Moby Dick CBD es una planta extremadamente vigorosa y resistente a plagas, lo que la convierte en una opción muy aconsejable para cultivadores principiantes ya que con pocos esfuerzos conseguirán asegurarse buenas cosechas al final de su cultivo. Su condición de sativa hace que sea una campeona imbatible frente a los efectos de la humedad. Sus hojas finas y su amplia distancia internodal facilitan la transpiración de la planta, evitando así la aparición de hongos temibles como la botrytis. Moby Dick CBD es una buena opción para cultivo exterior en climas húmedos o fríos, si bien, como cualquier planta de cannabis, agradecerá y dará lo mejor de sí cuantas más horas de sol reciba, por lo que es aconsejable cultivarla durante los meses más cálidos del año -entre marzo y octubre en el hemisferio norte o septiembre y abril en el sur-.
En lo que respecta a su fertilización, al igual que el resto de sus hermanas, Moby Dick CBD es una tragona que pedirá algo más que la dosis estándar. En cualquier caso, antes de lanzarte a atiborrarla de nutrientes, te recomendamos que estés atento al fenotipo y vayas viendo qué te pide la planta.
El tamaño de maceta adecuado para Moby Dick CBD es de entre siete y diez litros. Esta es la medida estándar que te permitirá sacar el máximo rendimiento de esta genética. Con macetas más pequeñas, por ejemplo, de cuatro litros, sus niveles de producción quedarán algo mermados.